Hello.
I have been lucky enough to have traveled a bit. As an adult much of this has been international and some of it, particularly recently, has been to Europe.
I have several thoughts going through my head and I would love answers and opinions on any or all of them. Here goes…
I have heard that English is the language of choice — almost necessity nowadays — that is studied in school in Europe. I presume you feel this is correct…?
I know that many people, especially those involved in the tourist industry speak English, as is the case all around Europe, but I wonder if this is the case with, say, French, German and Italian particularly in Spain. Surely, there is a strong tourist presence from those countries. I know that there were waiters who spoke German at restaurants in southern Spain when I was there. Would you say the numbers of American tourists is greater than the number from the other countries I mentioned? Would you say it is true that Spanish, in general, is not spoken outside of Spain?
I recently visited Amsterdam and was amazed at how much English was spoken. I saw Dutch store owners greet even Dutch customers in English. Maybe it was just easier to do it that way, I don’t know. I am not sure that their command of French or German was that good.
Are there any specific things that mark us as Americans? Other than the fact that we are: loud, fat, demanding, wear shorts and white gym shoes, carry cameras and don’t speak a word of your language? I remember some German nationals even telling me that it was the way we had our hair cut. The other interesting point is that — I am generalizing here — most American men wear some sort of hat. A baseball cap or flat cap or something. I have heard that Spanish men do not do this. I love hats and I never know what I should bring and/or wear in Spain or any other European country.
And now, just an observation based on some of my experiences, not just on my most recent trip, I can understand why we Americans are so hated by people from other countries. Some of the things that were said and done just made me want to crawl under a rock and die.
I look forward to hearing any and all ideas and opinions!
Many thanks.
Hello Gerardo.
I think American tourists, as well as of other nationalities, are very welcome in Spain. Not so many Americans come to visit the country. The majority of tourists come from Germany, the UK and now maybe also from Russia. But! I suppose it could depend on the region. I’m a bit surprised to hear what you say about Americans being hated by people from other countries. Well, it’s pity rather than surprise.
I just don’t like generalizing or stereotyping. Every person is a world unto himself. Anyway, I’ll try to answer your question: maybe American tourists can be a bit demanding, loud and, yes, some men seem to wear baseball caps at all times. And, actually, I found that many Americans speak Spanish or understand a great deal of it.
Today, quite a few Spanish people, especially the younger ones, have fairly good English. It wasn’t like that in my time. That’s right, English is the most studied second language, although German and some other languages are becoming more and more popular.
Having said all of that, I don’t see mysef as a typical Spaniard, if there’s such a thing, so let’s see what others say.
Un cordial saludo.
Hola, D. Gerardo:
Es muy difícil hablar de los características asociadas a las personas de las distintas nacionalidades mundiales sin caer en los tópicos. ¿Qué estadounidense no piensa en un hombre con sombrero de ala ancha comiendo paella y bebiendo sangría entre ‘olé’ y ‘olé’ -un rato antes de echarse a dormir la siesta- cuando le preguntan por un español? (Suponiendo que sepa dónde está España). Pues eso es tan injusto como decir que todos ustedes cuando pasean como turistas lo hacen en pantalón corto, con sandalias y calcetines y masticando chicle con la boca abierta. Sin embargo, estará Ud. de acuerdo conmigo que a pesar de estas injusticias, si existen esos prejuicios, por un lado y por otro, es porque ‘el río suena cuando agua lleva’.
Vivo en una ciudad muy turística al sur de España. Estoy acostumbrado desde siempre a los autobuses repletos de turistas de todos los países recorriendo sus zonas monumentales. De muchacho, para pagar mis estudios, trabajé cierto tiempo en un comercio de ‘souvenirs’. He tenido la modesta experiencia de tener trato comercial con personas de diversas nacionalidades, y si la fotografía que le he mostrado antes es cómica por exagerada (la propia de cualquier caricatura) sí le digo con franqueza que el rasgo característico que yo observo del estadounidense medio es el de la ‘prepotencia’ en el trato y el desahogo en el comportamiento en algunas situaciones, propio de la sensación de superioridad que da sentirse ciudadano del país más potente del mundo en tantas cosas. Cuando por la calle me preguntan en inglés por alguna dirección, mapa en mano, sin un previo y gentil «Sorry, but I do not speak Spanish» que muestra su suposición de que yo sí debo hablar inglés, suelo contestar en su propio idioma que lo siento, que no lo entiendo y que cualquier persona que viaja a un país extranjero debe de tomarse el trabajo de aprender las mínimas palabras necesarias para desenvolverse.
Espero que estos comentarios no le sienten mal porque se refieren solo a las formas inconscientes que, sin intención, destilan sus formas. No hay ni que mencionar que en lo humano, son ustedes tan agradables, afectivos y cariñosos como quieran serlo. Como el resto de la humanidad.
Reciba un cordial saludo y mis felicitaciones por el interés que muestra por nuestra cultura, cosa que le honra y hace ganar mi estima.
Gerardo, me sumo a las felicitaciones que te lanza Milord. Enhorabuena por el interés que muestras acerca de nuestra cultura y por el idioma español.
No sé si te interesará o si le interesará a alguien, pero puedo hablar un poco más de los estadounidenses que he conocido en mi vida —no pocos, por cierto—. Para mí, los estadounidenses son muy majetes. Puede que haya podido tener suerte o que sea cuestión de personas o de momentos y sitios determinados. Me quedo con esto último; no ha sido solo suerte.
Si tengo que poner un pero, sería que algunos pueden ser algo prepotentes y exigentes. Además, hay que tener en cuenta que no es lo mismo toparse con un turista en la calle o con alguien en unas vacaciones que trabajar con las personas o convivir años con ellas. Recuerdo que, por ejemplo, cuando estaba trabajando en un restaurante en Australia, mi jefe (Aussie) me avisaba en cuanto sabía que venía un grupo de estadounidenses al local, para que me mantuviese alerta. Sabía que podía haber algún tipo de problema debido a ese carácter general del que he hablado y quería tenerlo todo más atado de lo normal. Nunca tuve ningún problema digno de mención y sigo pensando que todo depende de las personas en sí.
Lo lamento pero, aunque me gustaría mucho no puedo hacer ningún comentario a tu publicación, pues no entiendo inglés. No sé si tú sabrás español y lo podrías volver a poner en este idioma. Ojalá que sí. Saludos.
Buenas noches a todos:
Me voy a tomar la libertad de traducir para Luz el texto de Gerardo. Lo hago con la mejor voluntad y de forma rudimentaria porque mis conocimientos de inglés no dan para más, por lo que os pido que no dudéis en corregir todo lo que haya que corregir, en confianza. Os lo agradeceré.
Y creo que eso es todo.
**Pero no tengo claro si puede o no puede entender por qué odiamos (?) a los americanos.
Y esto ya lo sabe Gerardo, el español, además de en España, se habla en países americanos también, como México, El Salvador, Guatemala, Honduras, Costa Rica, Panamá, Nicaragua, Rep. Dominicana, Cuba, Colombia, Venezuela, Chile, Perú, Argentina, Paraguay, Uruguay, Ecuador, Bolivia, y no sé si me he dejado algún país más en el tintero. Así que no, a la pregunta de si el español apenas se habla fuera de España, no.
En cuanto a si nos visitan más estadounidenses (confío en que sean de ese país los americanos a los que alude Gerardo) que ciudadanos de otros países como Francia, Alemania o Italia, me remito a un informe de abril de 2015 del Instituto de Turismo de España que podréis ver en este enlace (si tenemos la suerte de que se abra)
http://www.iet.tourspain.es/es-ES/estadisticas/frontur/mensuales/Nota%20de%20coyuntura%20de%20Frontur.Abril%202015.pdf
Los visitantes de Reino Unido, Francia y Alemania estuvieron a la cabeza el pasado mes de abril.
Aunque parece que para el cómputo general esto no tiene mucha importancia, al País Vasco últimamente vienen muchos japoneses.
Un abrazo.
Muchas gracias, Luz, por contribuir a revivir este tema (disculpa la paliza que te he dado para que lo hicieras …). Con el permiso del autor, me gustaría decir que él entiende perfectamente el español y que, quizá, incluso se animará a escribir en este idioma. Disculpa mi atrevimiento, Gerardo, sé que no te importará. 🙂
Me parece un tema muy interesante el que plantea Gerardo y me ha extrañado un poco ver que solamente Milord y yo hemos dado nuestra opinión. Ahora ya no hay excusas para nadie (je, je).
En resumen, aparte de lo del lenguaje y demás, Gerardo pregunta por cómo vemos los españoles a los turistas estadounidenses; con qué rasgos físicos y de comportamiento los asociamos y qué creemos que los hace ser odiados. Y quiere saber la situación real y obtener opiniones sinceras.
Madri siempre al quite. 🙂 Veo que pides una manilla con el final. Entiendo que el último comentario de Gerardo — que lo hace basándose en algunas de sus experiencias pasadas, no solamente tomando en cuenta su último viaje—, es sobre que puede entender que los americanos sean tan odiados por personas de otros países. Yo te preguntaría, Gerardo, ¿podrías decirnos cuáles son esas cosas que oíste de otros americanos y viste que hacían que te hicieron sentir tan mal, por favor? Por cierto, yo vendría a España llevando los sombreros que quisiera y yendo vestido como me apeteciera. 🙂
Hello all!
Just a quick note. I have been absent because of a family situation which has required a lot of my time.
Many thanks to all who have responded, especially to Madri, who did such a great job translating my original and Igbent for the very kind words.
As a quick example of what horrified me so, I will give these two examples:
I went on a guided tour of Paris, given by a native Parisian woman. It was in English. When the tour was over she said, «Au revoir», to which a woman behind me said in a very loud voice, «Oh isn’t that cute — she said ‘Oh rave wahr.’ My wife and I almost died.
And, on a tour in Barcelona (also in English) at the FC Barcelona stadium, our guide said something about «futbol» and some Americans said, again as loud at they could, «That’s not football, we have football in the USA.» Again, it was a ‘near-death’ experience for us.
Greetings to all!
Gracias por los ejemplos, Gerardo.
Yo creo que lo que relatas no es típico solamente de los estadounidenses; yo he presenciado cosas parecidas con turistas de otras nacionalidades. Los japoneses, que menciona Madri, me parecen los más educados socialmente. A Australia van muchos turistas japoneses —o al menos era así cuando yo estaba allí— y puedo dar fe de ello. A ver si se pudieran bajar desde el País Vasco y se pasaran más por este centro olvidado de la Península.
Con respecto al lenguaje, lo que sí tienen bastantes estadounidenses es la creencia ciega de que el inglés americano es el idioma mundial, que es mejor que cualquier otra variedad del inglés y que todos deberíamos dominarlo.
Añado una experiencia reciente mía. Hice varias traducciones del español al inglés con un colega estadounidense. A mí me parece normal que si la traducción es al inglés, un angloparlante tenga más que decir que un hispanohablante, pero este colega no aceptaba ningún tipo de sugerencia. Resultó que todas mis sugerencias, que corregían errores gramaticales y de estilo, eran válidas, así que se negó a trabajar más conmigo porque sintió que su orgullo salía malparado.
Esperemos poder contar con otras experiencias y opiniones.
Creo que lo que Gerardo y su mujer sintieron en esas ocasiones pudo ser «vergüenza ajena». En más de una ocasión la he sentido al presenciar el comportamiento de algunos turistas españoles, pero especialmente una vez que coincidí con un grupo de veinte o veinticinco jubilados españoles en una visita a las cuevas de Bétharram, en el sur de Francia. Es un lugar hermoso y sobrecogedor por sí mismo, pero si se añade el ruido de veinte personas, o más, gritando y riendo como poseídos y golpeando las puertas metálicas del trenecito que recorre el último tramo de las cuevas, puede resultar terrorífico.
Creo que no hay nacionalidad que se libre de elementos así. Aunque, como dice Blasita, los japoneses son ejemplares.
Buen domingo a todos.
Ah, sí, esa vergüenza ajena de la que habla Madri también la he sufrido yo.
Por ejemplo, me acuerdo ahora de una vez en un viaje. En la primera escala, Singapur, cambiamos de avión y me tocó compartir fila de asientos con una pareja de turistas españoles. Desde el mismo momento en que se sentaron, no dejaron de criticar —a voces— a todos los pasajeros y personal de vuelo; casi todos a los que su vista u oído alcanzaban. La mayor parte de los pasajeros parecían ser ingleses. Llegaron a reírse de un disminuido psíquico que estaba sentado en la fila de al lado, quien, menos mal, ni entendía el idioma ni se dio cuenta de que se estaban riendo de él. Yo iba leyendo una revista en inglés y debieron dar por hecho que no entendía lo que decían. Más de una vez estuve a punto de saltarles al cuello, pero se veía claramente que no eran del tipo de personas que aceptarían un comentario al respecto.
Vi que había un asiento libre un poco más allá y le pregunté a una azafata si podía cambiarme de sitio. Nunca volaba con Iberia en esos trayectos, pero esta vez hubo un problema técnico con el vuelo de Qantas y dio la casualidad de que nos pasaran a esta otra compañía para el Singapur-Londres. Así que el personal del avión era todo español, pero el caso es que en lugar de preguntárselo en español lo hice en inglés para que esta pareja no viera que estaba entendiendo perfectamente todo lo que decían: por vergüenza ajena. (Por cierto, no sé si estas «historias de la abuelita» pueden estar aburriendo al personal. Espero que no …).