Buenas noches.
Me atrevo a traeros esta consulta porque sé que ya me vais conociendo y podéis tranquilamente esperar cualquier cosa de mí, por rara que parezca.
Hoy va de refranes y de su corrección sintáctica. Le ha tocado a este, que generalmente veo que empieza por quien. Así lo recoge el refranero del CVC y mi enciclopedia Larousse de no sé cuántos tomos…
https://cvc.cervantes.es/lengua/refranero/ficha.aspx?Par=59342&Lng=0
Me parece que debería comenzar por la preposición a porque quien a buen árbol se arrima es una oración subordinada sustantiva con función de complemento directo (de persona) de cobija.
Si invirtiéramos los elementos de la oración completa, diríamos que la sombra cobija A quien a buen árbol se arrima, sin prescindir de la preposición. ¿Estamos ante un anacoluto?
Sin embargo, y creo que tiene la misma construcción que este, nos encontramos con que «A quien madruga, Dios le ayuda» sí lleva la preposición, como corresponde. Y todo el mundo lo dice bien; no he escuchado a nadie que diga Quien madruga, Dios le ayuda, ni tampoco lo he visto mal escrito.
¿Qué os parece?
Un abrazo.
Buenas:
Estaba yo, Madri, con los errores lingüísticos y no me he dado cuenta de que habías entrado a echar un ratito en este confortable Café. Pues siéntate y pide lo que gustes.
Yo creo que en lo del refrán tienes toda la razón, puesto que, efectivamente, la sombra del árbol cobija a quien se arrima a él. Distinto sería decir: Quien a buen árbol se arrima, buena sombra consigue. Luego esa a es necesaria porque la pide el verbo cobijar: Yo no cobijo en mi casa mi primo, sino a mi primo.
Además, creo que en la frase del refrán hay también un leísmo.
Recuerdo que hace años salió una serie de parodias de refranes conocidos, como aquel que decía: Cría cuervos… y tendrás muchos; o aquel otro: Ojos que no ven… caca de perro que pisan. Y también recuerdo que sacaron una parodia de este que estamos tratando (y además, con rima). Decía: Quien a buen árbol se arrima, si nadie lo ve, se orina. Y mira tú por dónde, en este no hace falta la preposición a. 🙂
Es un gusto charlar en el Café contigo.
Un abrazo.
Buenas tardes, Madri, Robin y todos:
Gracias por compartir con nosotros otro nuevo y fascinante tema.
De acuerdo con vosotros, Madri y Robin. Creo que la omisión de la a en a quien … podría deberse a un intento de evitar la cacofonía, a quien a buen árbol …
Dos ejemplos, de dos clásicos de la literatura española:
Fuente: Segunda parte del Quijote de Cervantes, capítulo XXXII.
Fuente: La Celestina. Tragicomedia de Calisto y Melibea. Fernando de Rojas.
Un abrazo.
.
Por más vueltas que le doy a la frase –para no tener que corregir a don Miguel ni a don Fernando– no me cuadra sin esa preposición.
Pero suponiendo que esté en lo cierto y a ese refrán le falte la a, yo creo que no es un error de esos escritores, puesto que ambos se limitaron a transcribir el dicho popular. Ellos no lo crearon.
Buenas noches a todos.
Esto mismo me parece a mí, Robin.
Buenas noches y un abrazo.
¡Hola Madri! Si no hubiera leído vuestras explicaciones, no habría pensado que era incorrecta sin la primera «a». A mi oído intoxicado (oigo cada cosa a diario …) no le suena mal sin esa «a». Al poner «a quien» en el lugar más normal, «buena sombra le cobija a quien a buen árbol …» se ve claro. Quizás sea lo que dice Blasita de la dos aes seguidas y por eso en «a quien madruga Dios le ayuda» nadie quita la «a» por haber sólo una.
Abrazos
Los refranes nos han llegado hechos, no hay que darles más vueltas. Lo que ocurre es que no siempre cumplen con las reglas de la sintaxis y parece que se intenta tomar cartas en el asunto. La última Ortografía recomienda prescindir de la coma que aparece tradicionalmente entre sujeto y verbo de algunos de ellos:
y que se escriban así:
Quien la hace la paga,
Quien a hierro mata a hierro muere,
Quien calla otorga,
Quien canta sus males espanta,
Quien tiene tejado de vidrio no tire piedras al de su vecino,
etc.
Y el del árbol, peor es meneallo. Va a tener razón Blasita en que la cacofonía ha de ser la responsable. Pero este asunto también me tiene a mí inquieta porque no acabo de comprender por qué dicen que hay cacofonía en la águila, la alma, la alba y no en la áspera, la árabe o la árbitra .
Me ha encantado este ratito con todos vosotros.
Un abrazo.
¿No podría ser que hablen de cacofonía en las tres primeras por el artículo «el» y en las últimas no porque no es el caso?
Abrazos
Buenos días:
Vuelvo al tema del árbol de Madri porque me he encontrado con esta frase en el libro «Historia de España contada para escépticos», de Juan Eslava Galán, en la última línea de la página 17.
El autor cita el refrán pero cambia «Quien» por «El que», que tiene el mismo significado, de modo que la frase, entrecomillada, queda de esta manera:
«El que a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija».
Pero yo encuentro que estamos en las mismas, o sea, que para que la frase fuera correcta tendría que haber escrito «Al que a buen árbol…», porque «Al que» equivale a «A quien», que es lo que yo mantuve en aquel lejano 7 de enero del 19.
Otra cosa que dije aquel día es que en la frase del refrán hay un leísmo, y que Eslava Galán lo ha corregido escribiendo «…lo cobija», ya que, de haberse referido el refrán a una mujer, es decir, si hubiera sido «A la que a buen árbol se arrima…» la frase habría terminado en «…buena sombra la cobija».
Pero solo es una opinión más. A seguir bien.